Las fiestas navideñas son un momento de alegría, convivencia y, muchas veces, excesos. Entre cenas familiares, postres típicos y un aumento en el consumo de dulces y bebidas alcohólicas, es habitual que se relajen los hábitos de cuidado personal. Sin embargo, esta época también puede ser un reto para nuestra salud bucodental.
Según Agustín Casas, especialista en periodoncia y osteointegración, “debemos tomar decisiones inteligentes para disfrutar de la Navidad sin consecuencias negativas para nuestra salud bucodental y general”.
Alimentación y salud bucodental: una relación estrecha
“Somos lo que comemos”, afirma Casas, y la salud de nuestra boca no es ajena a esta afirmación. La boca es la puerta de entrada de todos los alimentos, y como tal, está expuesta a las consecuencias de una dieta desequilibrada. Una ingesta excesiva de azúcares favorece la aparición de caries, mientras que los alimentos ácidos pueden erosionar el esmalte dental, aumentando la sensibilidad de los dientes.
La textura y consistencia de los alimentos también juegan un papel importante. Los alimentos pegajosos, como el turrón o los mazapanes, tienden a quedarse adheridos a los dientes, dificultando su limpieza y aumentando el riesgo de caries. Por otro lado, los alimentos duros, como el guirlache, pueden provocar fracturas dentales o daños en las encías.
Además, una dieta rica en grasas saturadas y azúcares no solo afecta a los dientes, sino que también está relacionada con la periodontitis, una enfermedad inflamatoria crónica que puede llevar a la pérdida de dientes si no se trata adecuadamente. “La inflamación es el nexo que une la mala alimentación con las enfermedades periodontales”, explica Casas.
Cómo disfrutar de la Navidad sin descuidar la salud bucal
A pesar de los riesgos, Casas insiste en que es posible disfrutar de las celebraciones navideñas sin comprometer nuestra salud bucodental. La clave está en tomar decisiones inteligentes y moderadas:
Limitar el consumo de dulces y alimentos azucarados: Los postres navideños como las frutas escarchadas, el guirlache y el mazapán son altamente cariogénicos debido a su alto contenido de azúcar y su textura pegajosa. Es preferible consumirlos durante las comidas principales, cuando la producción de saliva es mayor, ayudando a neutralizar los ácidos y limpiar los restos de comida.
Evitar los tentempiés entre horas: Mantener el consumo de dulces entre comidas aumenta el tiempo de exposición de los dientes al azúcar, lo que incrementa el riesgo de caries.
Hidratarse adecuadamente: Beber agua es esencial para mantener una buena producción de saliva, que actúa como una defensa natural contra las caries al regular el pH de la boca. Además, ayuda a prevenir la sequedad bucal, común durante las celebraciones debido al consumo de alcohol.
Adoptar buenos hábitos de higiene oral: El cepillado dental después de cada comida, especialmente antes de dormir, es fundamental para prevenir enfermedades bucodentales. Casas recomienda utilizar un cepillo eléctrico o manual, seda dental o cepillos interproximales, y pastas dentales con flúor. Además, aconseja esperar entre 20 y 30 minutos después de consumir alimentos ácidos para cepillarse los dientes y evitar la erosión del esmalte.
Optar por opciones más saludables: Combinar los platos típicos navideños con alimentos más equilibrados, como frutas y verduras frescas, puede ayudar a reducir los efectos negativos de una dieta hipercalórica.
El impacto de la salud bucodental en la calidad de vida
Más allá de los efectos estéticos, las enfermedades bucodentales como la caries y la periodontitis tienen un impacto significativo en la calidad de vida. La pérdida de dientes, por ejemplo, afecta la capacidad de masticar, lo que a su vez influye en la digestión y en la absorción de nutrientes. Además, puede llevar a cambios en los hábitos alimenticios, favoreciendo el consumo de alimentos blandos y menos saludables.
“No debemos subestimar las consecuencias de descuidar la salud bucodental durante la Navidad”, advierte Casas. “Es importante mantener una dieta equilibrada y un buen cuidado oral para evitar caer en un círculo vicioso de malos hábitos y problemas de salud”.
Consejos finales para unas fiestas saludables
Casas concluye con una serie de recomendaciones para disfrutar de las fiestas sin comprometer la salud bucodental:
Planificar las comidas: En los días de celebraciones, se pueden disfrutar los platos típicos sin abusar de ellos. En los días restantes, es recomendable optar por comidas más saludables cocinadas al vapor, a la plancha o al horno.
Evitar el tabaco y el alcohol: Ambos son factores de riesgo no solo para la salud general, sino también para la salud bucodental.
Incorporar ejercicio físico: La actividad física ayuda a mantener un equilibrio general en el organismo y puede contrarrestar algunos de los excesos típicos de la Navidad.
No descuidar la higiene oral: Mantener una rutina constante de cuidado bucal es clave, incluso durante las celebraciones.
Con estos consejos, es posible celebrar la Navidad de manera responsable y cuidar tanto la salud bucodental como la general. Porque al final, disfrutar de unas fiestas saludables es el mejor regalo que podemos hacernos a nosotros mismos y a nuestros seres queridos.
