“Estamos con la ilusión a flor de piel, como si fuese el primer día. Con todas las ganas y la energía para dar lo mejor de nosotros. La felicidad que tenemos es inmensa. Ahora sí… ¡volvemos a los escenarios!”, había anunciado la banda de pop rock Indios el pasado abril. De esa manera, el grupo finalizó una pausa de cuatro años con una serie de noches en Niceto Club, en lo que fue el tan ansiado reencuentro con el público que lo esperó durante este tiempo y aquellos que se sumaron en el impasse. Oriundos de Rosario (Santa Fe), el regreso a la escena se dio oficialmente el pasado 7 de junio en el club ubicado en el barrio porteño de Palermo. Debido a que se agotaron las entradas, se agregaron dos fechas más (8 de junio y 8 de agosto) y una cuarta (27 de septiembre), que culminó la visita a Buenos Aires. En el medio hubo un paso por Córdoba, mientras que los próximos destinos serán el Festival Harlem y Festival Bandera, ambos de su provincia natal. Entre pogos y banderas, Ratones Paranoicos realizó su show de despedida en Vélez: “El rock está más vivo que nunca”
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“¡Buenos Aires, nos vemos en la primavera! ¡Sale el cuarto Niceto Club para que nadie se quede afuera”, esa fue la invitación de la banda para sus fanáticos. De esa manera, los seguidores comenzaron a congregarse en la noche del jueves en el punto pactado. Cerca de las 21:30, se abrió el telón y aparecieron los protagonistas de la noche: Joaquín Vitola (voz), Nicolas de Sanctis (guitarra), Patricio Sanchez Almeyra (guitarra), Guillermo Montironi (bajo), Agustín Majdalani (sintetizador) y Federico Pellegrini (batería). A lo largo del show que duró una hora y media, el frontman convirtió el escenario en una pista de baile, moviéndose enérgicamente por toda la plataforma, saltando y bailando de manera rápida e incluso más íntima en algunos momentos. Sumado a esto, hubo oportunidades en las cuales los miembros bajaron de la tarima para estar más cerca del público, llegando a tomar de las manos a algunos fanáticos. En tanto, la gente acompañaba saltando y cantando los estribillos a los gritos.
El clima de fiesta y la conexión con el público
El primer tema de la noche fue “Cristal”, la última canción que estrenó la banda el pasado junio. A pesar de ser la pista más reciente, supo ganarse el aprecio de los fanáticos, ya que los presentes entonaron el coro con la misma intensidad con la que luego cantarían algunos de los clásicos de Indios. En medio de la interpretación, Vitola aprovechó el momento para saludar al público. Un simple “Hola” bastó para que la gente ovacionara aún más a la banda. “Buenas noches desangelados”, fue la frase que el cantante utilizó para dar pie a la segunda pista: “Casi desangelados”. En la pantalla que acompañaba a los músicos, se replicaba a los distintos integrantes del ensamble, con efectos de la psicodelia que caracteriza al grupo. “Rápido, Buenos Aires”, alentaba Vitola, lo que provocaba que la gente saltara con aún más velocidad. Luego siguió “Minuto 0”, también con iluminación naranja y roja, que asemejaba a la portada del álbum “Indios” del que forma parte la pista. Al turno de “Ritmo y percepción”, la iluminación se tornó violeta, mientras que la pantalla pasó a ser celeste, verde y naranja, los mismos tonos que el disco “Besos en la espalda”. Le siguió “Vení”, para la cual las luces rojas creaban una atmósfera más íntima con el público, sensación que era incrementada por los movimientos más lentos del frontman. “¿Cómo están? No se escucha, ¿cómo está Buenos Aires?”, preguntó Vitola antes de entonar “Perdiendo la cabeza”. Durante el tema, la conexión con el público se hizo muy fuerte, ya que incluso el propio cantante invitaba a la gente a corear: “A ver si cantan con nosotros, ustedes solos”. De esa manera, algunos de los párrafos fueron entonados por los fanáticos, para ser proseguidos por él. “Como ven, volvimos de Córdoba muy estimulados para llegar a este cuarto Niceto… Para llegar al asfalto”, ese fue el pie para “Asfalto”. Las luces rojas acompañaban la intensidad del tema, aunque por momentos pasaban a ser azules. En la pantalla también se apreciaban cambios: variaba entre una carretera y la silueta de una ciudad, similar a la tapa del álbum homónimo. Al finalizar la canción, se escuchó uno de los cánticos que se repitió a lo largo de las noches: “Olé, olé, olé, olé, Indios, Indios”. En la entrada del evento, los organizadores repartían posters del nuevo tema de Indios: “Imitándote”. Mientras Sanchez Almeyra tocaba unos acordes, Vitola desapareció por unos momentos. Cuando volvió al escenario, estaba disfrazado como un borracho, para lo que portaba una gabardina y sombrero, y tenía una botella de Fernet en la mano, de la cual simulaba tomar sorbos entre verso y verso. Además, poseía una linterna al lado del micrófono, con la que iluminaba a sus compañeros y distintos puntos del club. Esa fue la performance que acompañó a “Borracho en París”. Después le siguió “Tardes de melancolía”, que estuvo acompañada por burbujas en las pantallas. Para el estribillo, el cantante pidió ir “bien arriba”, por lo que él y todo el público comenzaron a saltar. “Estamos muy contentos de volver acá, es la última fecha de Indios en Buenos Aires”, expresó al final de la pista. Ante las protestas del público por esa información, aclaró que se refería a este año. Además, lanzó una primicia: el próximo jueves estrenarán una canción que contará con su propio videoclip. De esa manera, comenzó a entonar “Imitándote”, siendo que, en la entrada del evento, repartían posters con el nombre de la pista.
La tanda acústica: los momentos más íntimos de la noche
En la interpretación de “Chicos”, las luces se apagaron y el ambiente se volvió más privado. En ese sentido, los guitarristas y bajistas se sentaron en el piso, mientras que el cantante, que era el único iluminado, se arrodilló en el medio del escenario. Luego, tomó una de las luces y, cuando se encendió, apuntó a su rostro y al de otros miembros, similar al caso de “Borracho en París”. Para “Ya pasó”, los miembros volvieron a pedir ayuda de los fanáticos para entonar las estrofas. Incluso alentaban preguntando: “¿Y cómo dice Buenos Aires?” y “Que se escuche hasta Rosario”. Incluso en un momento Vitola bajó del escenario para cantar al lado de los fanáticos. Después le siguió “No te quedes solo”, donde la conexión e intimidad con el público seguía palpándose fuerte. “¿Cómo estamos? Vamos que tenemos que cantar. ¿Están listo para mucho más? Muchas gracias, qué lindos verlos de vuelta”, indicaron al final, aprovechando para presentar a cada miembro. Cuando las luces se apagaron, abandonaron la escena por unos momentos. Luego, reaparecieron De Sanctis y Vitola con una nueva vestimenta, dando así inicio a la tanda acústica, compuesta por “Fobia” y “Todas las flores de enero”, esta última entonada por el guitarrista. “Cómo están cantando, se saben todo”, bromeó De Sanctis al ver el entusiasmo del público. Después de ese momento donde la intimidad alcanzó el clímax, el resto de la banda volvió al escenario, también con outfits distintos. “A ver si conocen esta, un clásico del rock argentino, porque nosotros tenemos nuestras costumbres”, adelantó De Sanctis, dando pie a un cover de “Costumbres argentinas” (de Los abuelos de la nada), que estuvo acompañado por estrellas en la pantalla.
La recta final de la mano de los hits
“¿Cómo estamos para la recta final? ¿Estamos con energía todavía? A ver si saltamos con esta canción bien alto”, expresó el guitarrista en la previa a “El Sol ya estaba ahí”. Como la letra del tema, la gente perdió el control que mantuvo durante los momentos más emotivos y volvió a la energía de las canciones más movidas. Alentados por De Sanctis, quien los motivaba a seguir saltando, la gente comenzó a bailar y moverse con vigor. Manteniendo ese ritmo, prosiguió “Jullie”, uno de los mayores hits de Indios. “Muchas gracias por venir. No vamos a negar que los amamos”, mencionó Vitola en la previa al tema. Durante esa pista se vivió una verdadera fiesta: tanto el público como los miembros estaban saltando y cantando, mientras la pantalla de fondo mostraba ondas de volumen. Nuevamente, algunos integrantes de la banda bajaron del escenario para vivir la experiencia más cerca de sus fanáticos. Ese mismo ánimo se mostró en “Tu geografía”, otra de sus canciones más exitosas. Con las luces rojas equiparando la intensidad de los seguidores, el cantante celebró: “Arriba Buenos Aires. Esto es Indios, desde Rosario al mundo”. En tanto, el último tema de la noche fue “Lucidez”. “Todo el mundo levantando la voz”, pidió el frontman en el estribillo, a la par que movía las caderas al ritmo de la música. “Última y nos fuimos”, arengó, invitando a los fanáticos a gritar aún más alto. “Para siempre. Chau, los amamos”, expresó Vitola cuando terminó la pista. Acto seguido, las luces se encendieron y en la pantalla se leía “Indios”. Con esa postal de fondo, la banda se acercó al frente del escenario y, luego de que el bajista repartiera más posters a las personas en primera fila, hizo una reverencia al público. El telón se cerró, dando así fin al show de regreso de los Indios. MB / Gi