Son varios los estudios que apuntan que sí, que las mujeres necesitan dormir al menos 20 minutos más que los hombres de media. Ahora, que tener el cerebro más activo durante el día sea la causa, un tema que de vez en cuando abre debate en redes sociales, es algo que pone en duda Ainhoa Álvarez, coordinadora del Grupo de Trabajo de Insomnio de la Sociedad Española de Neurología (SEN): “Esto no está demostrado. Es una teoría como otra cualquiera, pero no hay evidencia científica al respecto”, subraya a CuídatePlus.
Entonces, ¿qué justifica esos 20 minutos? La experta repite que la ciencia no es clara al respecto, aunque se cree que se deba a temas hormonales. “Tanto con la menstruación, como con el embarazo o con la menopausia, las hormonas cambian y marcan el sueño”, subraya. En este sentido, “más que con la regla, cuando las mujeres ovulan sí que se habla de hipersomnia (somnolencia excesiva) y de que necesitan dormir más”.
Por otra parte, Álvarez agrega que el período de lactancia también puede afectar al descanso. Así, “dando el pecho a los niños producimos más prolactina (hormona que produce la leche tras el parto y que interviene en el ciclo ovárico), lo que hace que tengamos más sueño profundo”, explica. Y es que, como apunta la experta de la SEN, “el cuerpo es sabio” y al encontrarse la mujer en un momento de la crianza en el que duerme poco, el organismo le recompensa con un sueño más profundo. “Las hormonas están hechas un poco para que cuando la mujer necesite estar más despierta porque tiene que cuidar a las crías, el cuerpo pueda restaurarse mejor”, resalta.
¿Los trastornos de sueño son más frecuentes en mujeres que en hombres?
Algunos trastornos del sueño sí que pueden ser más prevalentes en mujeres. Álvarez pone de ejemplo el síndrome de las piernas inquietas. Se trata de un trastorno muy relacionado con el hierro, que, por regla general, las mujeres tienen menos debido a la regla. Por esta razón, son más propensas a sufrir esta enfermedad, asegura la experta.
Asimismo, “también se ha hablado siempre de que las mujeres tienen más insomnio, pero es verdad que los últimos estudios tampoco lo ven tan claro. No hay diferencias notables entre ambos sexos al respecto”, indica. El insomnio es el trastorno del sueño más frecuente. Según la SEN, el 25-35% de la población adulta española lo sufre de forma transitoria, mientras que es un problema crónico en el 10-15%, es decir, unos cuatro millones de españoles.
Consejos para tratar de dormir lo suficiente
Hombre o mujer, la clave está en cumplir con unos buenos hábitos de sueño. Desde la Sociedad Española de Neurología (SEN), aluden a seis factores que influyen en la salud del sueño y, por tanto, en el bienestar en general:
La duración: cuánto se duerme a lo largo del día.
La eficiencia: cuánto se tarda en dormir y si se permanece dormido sin despertares.
El momento: cuándo se duerme.
La regularidad: mantener horarios de sueño y despertar estables.
El grado de alerta: si se es capaz de centrarse y mantener la atención durante las horas de vigilia.
La calidad: si el sueño es reparador.
“Tener buenos hábitos de sueño implica intentar dormir las horas suficientes acordes con nuestra edad, mantener un horario de sueño regular y evitar los factores o elementos que puedan alterar nuestro sueño como cenas copiosas, sustancias como el alcohol o el tabaco, el estrés, el uso de móviles u ordenadores en los momentos previos a acostarnos o la duración de las siestas, que no deberían de exceder los 30 minutos”, detalla Ana Fernández Arcos, coordinadora del Grupo de Estudio de Trastornos de la Vigilia y Sueño de la Sociedad Española de Neurología (SEN).
Además, para mantener una buena higiene del sueño, la experta anima a cuidar el entorno donde se duerme, a oscuras y en silencio; así como a tratar de realizar ejercicio físico de forma regular. Por último, concluye, “recordar que, aunque experimentar cambios puntuales en el sueño es algo normal, cualquier persona que no consiga tener un sueño reparador, a pesar de mejorar sus hábitos, debería consultar con su médico”.