Una buena hidratación es clave para las funciones esenciales del cuerpo, como la circulación de la sangre y que los órganos reciban los nutrientes necesarios. Pero si además queremos atender nuestra dieta, conviene saber qué bebidas engordan porque aportan más calorías.”Unos dos tercios del peso corporal son agua. Además, es la base de todos los fluidos corporales, como la saliva, la sangre, la orina, el sudor y el líquido articular. Ningún ser vivo puede sobrevivir sin agua”, establece la publicación de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH).Así, se sabe, el organismo pierde agua al sudar, ir al baño. Por lo tanto, hay que beber suficiente agua para no deshidratarse. Pero, está claro, no siempre (o pocas veces) las personas se inclinan por el agua. Beber líquidos debería bastar para aliviar una deshidratación leve, pero existen de alerta como la sensación de mucha sed y el dolor de cabeza. También, la boca o la piel muy secas, así como la orina más oscura.De todos modos, ante cualquier síntoma extraño o en caso de cambiar algún hábito vinculado a nuestra dieta, siempre es fundamental visitar a un médico o nutricionista para que nos brinde su visión profesional.
Qué bebidas engordan el abdomen
“Normalmente las bebidas con alto contenido de azúcar suelen ser consumidas cuando salimos a tomar algo o a comer y cenar fuera de casa”, explica a la nutricionista Ana Sánchez Morillas a Cuidate Plus.
Bebidas con alto contenido de azúcar provoca sobrepeso y grasa abdominal.En ese sentido, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda no sobrepasar los 25 gramos al día de azúcar. “Con beber uno o dos vasos de alguna gaseosa o jugo envasado ya estaríamos superando esta cantidad. Por eso es conveniente fijarse la cantidad de azúcar que llevan para consumir lo mínimo”, advierte la especialista.
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La medición básica relacionada con un buen estado de salud.A continuación, cuáles son las bebidas que deberíamos quitar de nuestra lista si el objetivo es bajar de peso.
Gaseosas o refrescos
Las bebidas gaseosas están siempre en la mira de los nutricionistas. Foto Shutterstock.“Los refrescos o gaseosas contienen muchísima azúcar, excepto los que son light o zero, que llevan edulcorantes. Una lata posee entre 25 y 30 gramos de azúcar”, afirma Sánchez Morillas. En gran medida se debe a su contenido de fructosa y jarabe de maíz, dos ingredientes que alteran el metabolismo y conducen a la obesidad. Además de los estimulantes y sodio, que producen retención de líquidos e inflamación.Algo similar sucede con las bebidas isotónicas, a las que se le atribuyen propiedades beneficiosas cuando se tienen problemas intestinales”, explica Sánchez Morillas.
Jugos de frutas azucarados envasados
Recomiendan revisar las etiquetas de los jugos de frutas azucarados que se compran.Los jugos de frutas azucarados son bebidas que engordan porque contienen demasiada azúcar y poca fibra. Parecen saludables, pero su proceso de fabricación disminuye las propiedades de las frutas.Ahora bien, preparar los batidos en casa no es dañino y tiene sus ventajas. Al provenir de frutas frescas, conservan sus vitaminas y minerales, y se pueden dejar libres de azúcares dañinas. De hecho, al beberlos sin colar se aprovecha al máximo su fibra natural.Existen ensayos que relacionan la fructuosa con un mayor riesgo de presentar problemas hepáticos a medio plazo, como el publicado en la revista Journal of Hepatology.
Bebidas energéticas
Bebidas energéticas después del deporte, un clásico. Consumir una bebida energética representa ese combustible necesario para cansancio físico y mental tras alguna actividad deportiva.Sin embargo, debido a sus componentes estimulantes y azúcares, se ubican en el listado de bebidas que engordan. Y en exceso puede afectar la salud nerviosa y cardiovascular.Cada lata o botella contiene alrededor de 225 calorías. Adicionalmente, concentran cafeína y sustancias químicas añadidas que tampoco son del todo buenas. De hecho, especialistas advierten que es mejor optar por el café natural o los jugos caseros energizantes.De acuerdo con un estudio publicado en American Journal of Lifestyle Medicine, el consumo de esta clase de bebidas es especialmente peligroso en adolescentes porque el cerebro se encuentra todavía en desarrollo.
Bebidas alcohólicas
Casi todo el mundo sabe que las bebidas alcohólicas son perjudiciales para salud. Lo que muchas personas ignoran que también colaboran en el aumento de peso.
Las bebidas alcohólicas, entre ellas los cocteles, son verdaderos enemigos de la dieta. “El alcohol puede causar aumento de peso en un par de maneras. Primero, tiene un alto contenido calórico, algunas casi igual que una comida, pero sin los nutrientes. Segundo, también es posible que se tomen malas decisiones alimentarias cuando se bebe”, especifica MedlinePlus, la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos.Yendo a lo puntual, su ingesta excesiva sobrecarga el hígado y disminuye su capacidad para digerir las grasas. A su vez, eleva el riesgo de hígado graso y desbalances en el metabolismo.
Cuáles son los beneficios de tomar mucha agua
Ya fue señalado que el agua es el componente químico principal del cuerpo e imprescindible para sobrevivir.En ese sentido, algunos otros beneficios de beber agua para hidratarnos, según enumeran desde el sitio Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigaciónElimina los desechos a través de la orina, la transpiración y las deposicionesMantiene la temperatura en niveles normalesLubrica y amortigua las articulacionesProtege los tejidos sensiblesPara que el cuerpo funcione correctamente, es preciso reponer el suministro de agua consumiendo bebidas y alimentos que contengan agua.
Beber agua para hidratarnos es clave para la salud. ¿Y cuánto líquido necesita el adulto promedio y saludable que vive en un clima templado? Las Academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina de los EE. UU. determinaron que una ingesta diaria adecuada de líquidos es la siguiente:Unos 3,7 litros de líquidos al día para los hombresUnos 2,7 litros de líquidos al día para las mujeres
