La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) informó que ha reforzado sus medidas de preparación y mitigación para proteger a los desplazados forzosos y las comunidades de acogida ante el aumento de las temperaturas en América Latina. Entre las provisiones que se han tomado destacan la impartición de talleres sobre gestión de albergues, capacitaciones para líderes comunitarios y apoyo a los planes de emergencia locales. ACNUR explicó que las medidas tienen el objetivo de hacer frente a los efectos del cambio climático y a un fenómeno de El Niño que se prevé que pueda tener fuertes impactos hasta abril de 2024. “En los últimos años, hemos presenciado los efectos del cambio climático en las mismas comunidades donde ACNUR trabaja. Este desafío vuelve aún más compleja la respuesta humanitaria, ya que se suma a las dificultades inherentes que sobrellevan las personas refugiadas y desplazadas, exacerbando su situación de vulnerabilidad”, enfatizó el director regional de la agencia en el continente americano, José Samaniego.
Capacitación y colaboración con albergues en Ecuador
La Agencia señaló que está intensificando las medidas de prevención y preparación para complementar los esfuerzos del gobierno en Ecuador, donde numerosas personas refugiadas y migrantes residen en áreas propensas a desastres naturales. Esto incluye capacitaciones a líderes y lideresas, talleres en gestión de albergues (en colaboración con la Secretaría de Gestión de Riesgos) y sesiones informativas para saber cómo mitigar el impacto del fenómeno de El Niño. Además, ACNUR colabora con ocho albergues nacionales y con una red más amplia de alojamientos en ciudades que reciben a un número importante de población refugiada, y dispone de kits de emergencia que beneficiarían a unas 8500 personas afectadas por desastres.
Asegurar el acceso a la asistencia en Perú
En Perú, el fenómeno de El Niño ha impactado a casi medio millón de personas desde marzo de 2023, perjudicando tanto a la comunidad local como a los refugiados y migrantes. El organismo señaló que colabora en la preparación de una respuesta coordinada con las instituciones públicas que trabajan en las áreas de desarrollo, inclusión social y gestión del riesgo de desastres, así como con otras agencias de la ONU en el país, ONG, socios y donantes.De esta manera priorizan la inclusión de las personas refugiadas y desplazadas en los programas de respuesta a situaciones de emergencia climática, así como en los planes de contingencia del Estado, para así asegurar su acceso a la asistencia.
Fortalecer la prevención en México
Por otra parte, el reciente impacto del Huracán Otis en las costas del Pacífico de México, potenciado en parte por el fenómeno de El Niño, demostró la necesidad de fortalecer el trabajo de prevención y de apoyo a las autoridades locales, señaló ACNUR.En este respecto, la agencia apoya a las autoridades locales a través de los alojamientos temporales, para garantizar la protección de los grupos más vulnerables. Como ejemplo citó la comunidad de El Bosque, en Tabasco, donde se monitorea el impacto del cambio climático en la erosión costera. ACNUR indicó que está trabajando con la comunidad y otras agencias en la búsqueda de soluciones.
Necesidad de una respuesta coordinada
La Agencia señaló que, ante el aumento de las necesidades tanto a nivel nacional como local, se requiere una respuesta coordinada. Sin apoyo suficiente y sostenido para trabajar en acciones de preparación y resiliencia, y también para atender las necesidades humanitarias que surgen a raíz de estos fenómenos, el impacto del cambio climático agravará aún más la realidad de las personas desplazadas forzosamente.“Por ello estamos trabajando con otras agencias, los gobiernos y las comunidades afectadas para que las personas refugiadas y desplazadas sean debidamente incluidas en los planes nacionales de adaptación, respuesta a emergencias y desastres naturales”, enfatizó Samaniego.En el marco de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP28) en Dubai, ACNUR urgió a la acción inmediata para afrontar el impacto del cambio climático y sus profundos efectos en las poblaciones desplazadas y las comunidades que las reciben. En esta línea, la campaña global ¿Cómo escapar del cambio climático? se dedica a difundir el mensaje de que la crisis climática afecta a todos, pero no por igual: las personas refugiadas y desplazadas y las comunidades de acogida son quienes más sufren los estragos de un mundo cuya temperatura continúa aumentando.